Han pasado casi 14 años desde que la estudiante de
intercambio británica Meredith Kercher fue asesinada en Italia,
un crimen del que Amanda Knox fue acusada, e incluso si ella fue
absuelta años después, cumpliendo dos condenas provisionales: las preguntas sin
respuesta permanecían entre la gente. Esta es, por supuesto, una plantilla que
agradecen los cineastas, tanto en el área documental como en la ficción. En
2018, el argentino Gonzalo Tobal se inspiró en la historia y realizo
la película ACUSADA (2018) donde una
joven es acusada del asesinato de su mejor amiga. Un año después se estrenó en Francia
(aquí nos ha llegado en 2021) el largometraje LA
CHICA DEL BRAZALETE (2019). Una
adaptación vagamente francesa de esta película, que utiliza un escenario similar,
pero establece diferentes acentos.
Lise, de 16 años, está acusada de haber asesinado a su mejor amiga. Durante el juicio, sus padres la defienden de manera inquebrantable. Sin embargo, a medida que su vida secreta comienza a desvelarse, la verdad se convierte en algo indiscutible.
El crimen inexplicable que ambas películas tienen en común es lo que importa menos en la historia. Por supuesto, esto se discute constantemente, de todos modos, en la corte judicial, y tampoco hay una escapatoria del tema en el guion. Durante 95 minutos, el público, tanto dentro como fuera de LA CHICA DEL BRAZALETE, puede ver pruebas, escuchar conjeturas y negaciones, en un intento por descubrir de alguna manera la verdad. Pero cuál es la verdad, cada uno tiene que decidirlo por sí mismo. La película no es un clásico thriller policial en el que al final un brillante detective ha juntado todas las piezas del rompecabezas para que todos sepan lo que está pasando.
El director y guionista Stéphane Demoustier, hermano de la actriz de reparto Anaïs, también se abstiene de involucrar a los medios de comunicación en el caso, como si realizo la película ACUSADA. Si bien el juicio de Knox fue noticia en todo el mundo, lo que se reflejó en la película argentina que denunciaba la codicia de la gente por tener la exclusiva, en LA CHICA DEL BRAZALETE los medios de comunicación se quedan más o menos fuera. Como resultado, el drama es mucho más íntimo que el modelo a seguir y se centra más en los personajes. Y, sin embargo, permanece a distancia de una manera irritante, sin permitirte nunca acercarte lo suficiente a Lise para ver realmente a través de ella y saber si puede o no, ser una asesina.
La película trata, por un lado, de los efectos de la sospecha que tiene los padres sobre su hija, que cada vez se disuelve más. Pero, sobre todo, es un juego con expectativas. Lise se sienta inmóvil en la sala del tribunal, no cambia de rostro, apenas dice una palabra. Esto no solo frustra a los padres, que quieren persuadirlos de que sean más emocionales para aumentar sus posibilidades de transmitir tristeza al jurado. El propio tribunal, los abogados, también están desesperados por cómo alguien se niega sistemáticamente a que la protagonista pueda ser inocente. ¿Ella es completamente indiferente? ¿asesinar a alguien, hace que te vuelvas un ser humano frio? ¿Puede simplemente no abrirse al mundo exterior? Y, de todos modos: ¿quién es Lise de todos modos?.
LA CHICA DEL BRAZALETE, es ante todo una especie de retrato que se compone desde el exterior, a partir del testimonio de terceros, familiares y amigos. En términos de encontrar la verdad, esto es, por supuesto, al menos un desafío, si no una imposibilidad: hasta el final, queda abierto si la joven es una víctima del sistema o una asesina, si es sincera o una hábil manipuladora. La película no solo juega con las contradicciones entre la apariencia externa y lo que realmente está en el interior. Al mismo tiempo, pregunta si uno puede alguna vez reconocer y captar completamente a otra persona o si solo consiste en moldear según los propios sentimientos de una persona, como debería ser otra persona diferente a ella.
En definitiva y resumiendo: LA
CHICA DEL BRAZALETE comienza como un thriller criminal cuando una
adolescente es acusada del asesinato de su mejor amiga. Pero la búsqueda de la
verdad de la película solo se preocupa en parte por la solución del caso en sí,
sino que plantea preguntas sobre la identidad y si puede captarse desde fuera, además
de intentar ahondar en los temas de ¿hasta que punto conocen los padres a sus
hijos? Y otros temas que prefiero no comentar porque seria spoiler. Sin duda
una película interesante, con un desarrollo muy teatral, pero convincente en
todo momento.
Si quieres disfrutar de la película LA CHICA DEL BRAZALETE y eres de Figueres o alrededores, nada mejor que en CINEMES LAS VEGAS.