Tras mantener un perfil bajo tras su derrota ante Ip Man,
Cheung Tin Chi se mete en problemas al combatir a un poderoso extranjero.
Al principio cuando salió el titulo de la película, pensaba
que se trataba de otra historia “random” que se aprovechaba de tener las
palabras “Ip man” en el titulo solo para poder tener éxito y que los espectadores
la vieran, pero no es así. MÁSTER Z: THE IP MAN LEGACY (2018) funciona como “spin off” de la saga interpretada por el
actor Donnie Yen, pero también como secuela directa de IP MAN 3 (2015) ya que continua los hechos ocurridos en la
tercera parte, donde Cheung Tin-Chi (Max Zhang) fue derrotado por el
maestro Ip y las consecuencias que ocurrieron tras ese suceso.
Edmond Wong y Chan Tai-Lee están nuevamente a
cargo del guion, donde previamente escribieron las tres películas de IP MAN. Conservan más o menos la misma fórmula con temas recurrentes
de honor, injusticia, corrupción e incluso valores familiares. Es una lástima
que la ejecución sea un poco decepcionante debido a la dirección descuidada de Yuen
Woo-Ping. La película también sufre de un ritmo desigual que tiende a
detener el impulso de la historia, ya que se esfuerza por desviarse por subtramas
que no llegan a casi nada (como el romance entre el personaje de Cheung y Julia
(Yan
Liu) entre otras. Si solo Yuen Woo hubiera simplificado la
trama y se hubiera concentrado más en el viaje de Cheung Tin-Chi mientras
amplifica las secuencias de acción, el resultado podría resultar más positivo
de lo esperado.
Las escenas de peleas son sin duda lo mejor de la película, ya
que al ser dirigidas por Yuen Woo-ping, que aparte de ser
director también ha sido coreógrafo de escenas de lucha como por ejemplo KILL BILL (2003) o TIGRE Y DRAGON (2000).
Las escenas de luchas, en particular las peleas individuales contra Michelle
Yeoh, Tony Jaa y Dave Bautista en tres ocasiones
separadas, son lo suficientemente emocionantes y entretenidas para el
espectador. Pero hay otros momentos en los que la acción se siente muy mal
organizada con las coreografías con cables que son exageradas e incluso falso y
antinatural. En una escena que tendría que ser memorable como es la pelea sobre
los letreros de neón, hace entretener al espectador con el problema del
excesivo uso del cable por los extras y el actor principal.
El actor Max Zhang, una vez más, demuestra
ser una presencia atractiva cada vez que participa en una escena de lucha. Pero
su actuación sin casi matices ni expresiones faciales juega en su contra y más
cuando en IP MAN
3 era un personaje secundario que se
recordaba. El resto de las actuaciones de los actores son en su mayoría un
resultado variado, con un Tony Jaa tristemente utilizado en un
cameo sin dialogo que simplemente está ahí para pelear, mientras que Michelle
Yeoh nos ofrece un gran papel y una gran escena de lucha donde ella es
la protagonista absoluta (y como nos gusta ver a Yeoh repartir “estopa”) aparte
del villano de la función Dave Bautista que da una interpretación
admirable aunque en la escena final de lucha se queda un poco corto.
En definitiva y resumiendo: MASTER Z: THE IP MAN LEGACY en tema
de guion no se puede comparar a la “trilogía” (se espera una cuarta entrega) de
IP MAN y puede ser una oportunidad perdida que no logra
llegar a su máximo potencial, pero gracias a las impresionantes dotes en las
artes marciales de Max Zhang y las secuencias de acción coreografiadas por Yuen
Shun-Yi hacen que la película sea un divertido entretenimiento,
mientras esperamos que Donnie Yen vuelva a ponerse en el
papel del maestro Ip.