Jason Bourne (2017)

-Jason Bourne (Matt Damon) ha recuperado su memoria, pero eso no significa que el más letal agente de los cuerpo de elite de la CIA lo sepa todo. Han pasado 12 años desde la última vez que Bourne estuviera entre las sombras. En medio de un mundo convulso, azotado por la crisis económica, la guerra cibernética, Jason Bourne vuelve a surgir, de forma inesperada, en un momento en que el mundo se enfrenta a una estabilidad sin precedentes, reanudando la búsqueda de respuestas sobre su pasado.


-Matt Damon retorna la función del amnésico agente del gobierno Jason Bourne,al que vimos por primera vez en el papel en EL CASO BOURNE (2002) para después bajo la dirección del director Paul Greengrass realizar EL MITO DE BOURNE (2004) y EL ULTIMATUM DE BOURNE (2007).Después de intentar seguir la saga con un nuevo agente que fue interpretado por Jeremy Renner en EL LEGADO DE BOURNE (2012) y que resulto bajo mi opinión un mal largometraje, Damon y Greengrass vuelve a hacer dúo para presentarnos JASON BOURNE (2017) donde vuelve después de 10 años para seguir buscando interrogantes en su pasado.


-La trama de JASON BOURNE,escrita por el propio Greengrass junto a Christopher Rouse,es un derivado de la narrativa que tuvieron MITO/ULTIMATUM sobre todo de la tercera parte, ya que los giros de guion y sorpresas de la historia se levantan desde la última aparición de Bourne.Mientras la película explora una parte no examinada del pasado de Bourne,esto queda como una parte secundaria de una historia y la excusa perfecta para la vuelta de Bourne, la parte principal nos ofrece todo lo que un fanático de la saga espera, pero con más acción que nunca.


-La historia principal es suficientemente sólida para servir los propósitos de la película, incluso si se repiten antiguos patrones de las anteriores. Se incorpora una trama que implica los medios digitales y la privacidad de los clientes mediante el personaje del magnate corporativo que se hizo multimillonario gracias a una aplicación (Ejem Facebook) y como esto parece ser la oportunidad perfecta para la CIA de vigilar a todo el mundo.Greengrass y su director de fotografía Barry Ackroyd vuelven al estilo visual que hizo famosa la saga, hablamos de secuencias de peleas con cámara en mano, corte y edición rápida, que hicieron que fueran copiados por otras películas del género. Aunque este estilo no es del agrado de todo el mundo, Greengrass ha llegado a dominar esta técnica a la perfección y que contiene sin lugar a dudas las dos mejores escenas de acción que se han podido ver en este año, el inicio en Grecia durante la revuelta política que tuvo el país y todo el segmento final en Las Vegas que es digno de aplaudir, en una época en que la acción casera y sin ordenador parece casi llevada a la extinción, se agradece que tengamos directores que sigan apostando por la “vieja escuela”.



-Matt Damon sigue siendo el ancla que hace que JASON BOURNE sea lo que es, a pesar de que la historia personal del personaje no es tan convincente como en las tres anteriores. Aquí Bourne ha sido endurecido y fue a peor debido al desgaste de intentar no se encontrado por nadie, no solo en lo físico, sino también en lo emocional, Bourne no es un hombre de palabras, aspecto que agradezco ya que en ULTIMATUM tenía una verborrea que aburría y Damon demuestra que ha nacido para este papel ya que es capaz de demostrar el estrés que tiene el personaje solo con expresiones y gestos faciales.



-En lo referente a los demás personajes:Tommy Lee Jones como director de la CIA no es un villano tan intrigante como lo eran los anteriores “titiriteros” (Chris Cooper en EL CASO BOURNE o Noah Vosen en EL ULTIMATUM DE BOURNE) haciendo que el juego del ratón y el gato entre él y Bourne sea un poco menos épico. En el extremo opuesto nos encontramos a Alicia Vikander con un personaje tan intrigante como Heather Lee, jefa de la sección de crímenes informáticos en la CIA que siempre se mantiene en el enigma de si es enemiga o amiga de Bourne, o si solo utiliza su cargo para poder llegar más arriba en la cima de la CIA, dándole un carácter fuerte. Vuelve también Julia Stiles como Nicky Parsons pero su papel no trae nada nuevo que no sea avanzar brevemente en la trama y para terminar Vincent Cassel que juega el papel de “activo” que tiene la tarea de cazar a Bourne (siguiendo los pasos de Clive Owen y Karl Urban delante de él) y añadiendo en esta ocasión una motivación personal para querer matar a Bourne a toda costa.


-En definitiva y resumiendo: JASÓN BOURNE es una de las mejores películas de acción en lo que llevamos de año, con unas secuencias realizadas con maestría por parte del director y con un guion que es imposible que llegues a aburrirte en sus 2 horas, manteniendo un ritmo que no decae en ningún minuto. Cierto es que se puede “atacar” a esta película diciendo que es un epilogo innecesario y que EL ULTIMATUM DE BOURNE ya cerraba todos los cabos sobre el personaje, pero la vuelta del dúo Damon/Greengrass se siente más fresca que nunca y ojala cada 10 años (o menos) no vuelvan a ofrecer una historia de calidad de alto nivel como la que nos ofrecen con esta pelicula.Recomendada.