Asia Presenta: Matango (1963)

 

Japón es uno de los pocos países que ha procesado su trauma histórico en películas y todo dentro de un género de ciencia ficción. Tomemos por ejemplo GODZILLA. JAPON BAJO EL TERROR DEL MONSTRUO (1954) donde esta película es el proceso del trauma de las bombas atómicas. El director de la película fue Ishirô Honda, quien también dirigió la película MATANGO (1963) otra película que contiene radiación nuclear pero esta vez también trata sobre hongos (si, habéis leído bien). Porque la película está basada en un libro de William Hope Hodgson. Por supuesto, la película es un poco diferente y puedes ver claramente su antigüedad debido a sus años.

Siete turistas naufragan en una extraña isla tropical. No se detectan animales, no hay comida, casi no hay agua potable. Los supervivientes detectan pronto restos de otros muchos naufragios, pero nadie en la isla. Debido a sus condiciones empiezan a surgir disputas por casi todo, hasta que el hambre lleva a algunos de ellos a comer los hongos que parecen plagar parte de la isla y los restos de los naufragios...

La trama de MATANGO lo tiene todo para ser una buena película, pero que solo se consigue al final del metraje. El problema que tiene el largometraje es que se alarga una y otra vez las escenas y eso que solo dura 89 minutos. Sin duda, se siente como una película de metraje extenso (aunque no lo es) y eso ocurre principalmente al principio. La historia se toma mucho tiempo, primero en el yate y luego en la isla. La exploración toma lo que parece una eternidad y es poco emocionante. Se vuelve más interesante cuando los personajes encuentran un barco en la isla. Como espectador, te preguntas qué pasó y qué está haciendo en la isla. Pero no hay explicación para esto. Pero una cosa está clara para los personajes, deben quedarse allí. Pero eso es el principio del fin.



El foco principal de MATANGO es sin duda la supervivencia. Entonces, la amenaza del exterior de los hongos nunca es realmente un peligro, sino más bien los problemas realistas, como la escasez de alimentos y agua potable. Toda la historia sobre el hongo y lo que le hace a la gente sucede al margen y solo gradualmente se incorpora en MATANGO. Siempre hay pistas, como el espejo perdido o los breves momentos en los que hay algo en la ventana o en el barco. Pero estos son cortos y nunca se usan realmente para crear una confusión o terror en el espectador. Después de 54 años, es difícil que una película conmocione o asuste a la gente. Porque los tiempos han cambiado y también las amenazas y las motivaciones. En MATANGO también hay mucha crítica social, porque la vida en Tokio se describe como desenfrenada y la gente en la isla ya no puede hacer frente a la vida. También las bombas atómicas lanzadas por Estados Unidos y lo que la radiación le hace a la gente. El hongo aquí representa las mutaciones que fueron causadas por la radiación atómica, por lo que sigue siendo una critica social por parte del director Ishirô Honda, pero añadiendo que el ser humano por naturaleza, al verse acorralado, será capaz de cualquier cosa, y eso los personajes en la película lo llevan hasta las ultimas consecuencias.



En lo que se refiere a los efectos visuales o el estilo con el que esta filmada la película, todavía mantiene un estilo atemporal, incluso si el estilo de ropa o los colores de neón de Tokio parecen diferentes. Los efectos prácticos del inicio con la tormenta y el yate se ven convincentes y donde claramente se ve que el director sabe manejar esos efectos. Además, hay que destacar la primera aparición del hongo mutante, donde se juega con la oscuridad, el sonido, hasta que la luz directamente se enfoca en él, creando una sorpresa para el espectador.



En definitiva y resumiendo: MATANGO es una película poco conocida del estudio Toho, lo cual es interesante. Pero también puedes ver su antigüedad y notar que han pasado muchas cosas desde 1963 y que el terror funciona de manera diferente. Otro motivo para destacar es que, quien espere una película de hongos o setas mutantes atacando a un grupo de gente, se va a llevar una gran decepción, porque eso solo ocurre casi al final de la historia, ya que el guion esta mas centrado en la supervivencia y en como el ser humano puede llegar a corromperse. También decir que su ritmo en el primer acto es muy lento, y solo son repeticiones de acciones, lo que puede llevar a el abandono por parte del espectador (lo que seria un error). Una curiosidad tanto para los amantes del cine asiático como para los del cine clásico, que merece, al menos, un visionado.