¿Serias capaz de hablar con la persona que le arrebato la
vida a un ser querido? Esta pregunta se replantea en la película MAIXABEL (2021) de la directora Icíar Bollaín,
una historia real que trata la reflexión, el dialogo y el perdón y que posiblemente
sea el mejor largometraje de la directora desde TE
DOY MIS OJOS (2003).
En el año 2000 ETA asesina a Juan María Jaúregui. Once años más tarde, su viuda Maixabel Lasa, recibe una solicitud extraña cuanto menos: uno de los asesinos ha pedido hablar con ella en la cárcel de Nanclares de la Oca en Álava, en la que vive encarcelado tras haber abandonado la banda terrorista y la lucha armada. A pesar de las dudas y del inmenso dolor, la mujer accede a encontrarse cara a cara con una de las personas que acabaron sin miramientos con la vida de quien había sido su compañero desde la adolescencia.
Esta claro que el conflicto de ETA que duramente tuvimos que sufrir en nuestro país, es un tema difícil para realizar una historia (ya sea verídica o no) y sobre todo mantenerse siempre en una idea preconcebida que no dé lugar a equívocos. Icíar Bollaín trata la historia real de Maixabel (Blanca Portillo) y el etarra Etxezarreta (Luis Tosar) desde el total respeto, y con un guion coescrito junto a Isa Campo consigue una realización teatral donde lo importante son los personajes, lo que sienten y sufren, ya sea desde el lado de la victima como del victimario.
Esa dirección es fría en colores, pero con un alma impresa durante todo el metraje, sin alardes de ningún tipo y no siendo “tramposa” con el espectador, lo que demuestra que Bollaín es una buena directora de este tipo de dramas de personajes. Sabe cómo tratar una escena donde el dialogo es el protagonista, con los silencios propios para que el espectador se sienta dentro de dicha conversación. Y también sabe tener el tacto en temas controvertidos como el perdón de ETA y la propia culpa de los etarras por los asesinatos cometidos. No creo en ningún momento que se haya querido blanquear la banda terrorista y los propios terroristas (como algunos periódicos han querido subrayar) si no que la directora ha querido subrayar la palabra perdón, que en este caso se tienen que dar tanto Maixabel, para poder ser una persona de nuevo, como en el caso tanto de Etxezarreta y Luis María Carrasco Aseginolaza (Urko Olazabal).
Pero MAIXABEL no sería una buena película si no fuera por las actuaciones, y esta claro que tanto Blanca Portillo como Luis Tosar están sublimes. En ningún momento en la pantalla he visto a Portillo, si no a la autentica Maixabel, viendo que la actriz es capaz de mimetizarse con su personaje y dándole un trato desde el corazón. Luis Tosar se queda un poco atrás en temas de interpretación referente a Blanca Portillo, pero es difícil dar vida a un etarra arrepentido y creo que Tosar hace un trabajo magnifico (sobre todo en el tercer acto). No hay que dejar de mencionar al actor Urko Olazábal, que como secundario, también realiza un papel digno de mención, con una escena junto a Portillo justo en mitad de la historia, que merece mucho la pena. Bollain no ha podido tener mejor ojo para elegir un elenco de primera categoría y cuya dirección de actores es ejemplar (tanto como el guion).
En definitiva y resumiendo: MAIXABEL
es una buena película, que quizá tenga defectos (como repetir algunos esquemas en
más de una ocasión), lo que puede hacer que el ritmo se atasque durante el
largometraje, pero la dirección de Bollaín, el elenco y un tercer
acto que directamente te deja pegado en la butaca, tanto que hasta en lo créditos
finales era incapaz de levantarme. Directa, sobria, elegante e inteligente… MAIXABEL merece estar en las quinielas de las
nominaciones de los Goya del próximo año, aunque quizás, tenga un duro competidor
cuyo apellido es Almodóvar.
Si quieres disfrutar del estreno de MAIXABEL, nada mejor que en CINEMES LAS VEGAS a partir del 24/09 si eres de Figueres o alrededores.