La parapsicóloga Elise Rainier (Lin Shaye) afronta su
caso sobrenatural más terrorífico: en su propia casa.
INSIDIOUS: LA ULTIMA LLAVE
(2018) es la cuarta entrega de la franquicia INSIDIOUS, pero tiene lugar cronológicamente
entre la película original (que se estrenó
en 2011) e INSIDIOUS 3 que se estrenó en 2015. Como implica
el subtítulo de la película, La Ultima llave, sirve, sin embargo, como
conclusión de la historia que el guionista Leigh Whannell y el director James
Wan pusieron en marcha por primera vez con la espeluznante historia de
la familia Lambert que ocurrió hace siete años. Mientras La Ultima llave no
amplía la mitología de la franquicia de terror sobrenatural, sino que
constituye una narrativa independiente que desarrolla la historia del personaje que se ha convertido en la
verdadera protagonista de estas películas: Elise Rainier.INSIDIOUS: LA ULTIMA LLAVE es un sólido final para la franquicia, que le da al “líder”
de la serie, Lin Shaye, la oportunidad de hacer un elegante final.
Escrita por Whannell (que también escribió las
tres películas anteriores), INSIDIOUS: LA ULTIMA LLAVE está dirigida por Adam Robitel: director de la
aclamada película de terror / thriller THE TAKING OF DEBORAH LOGAN (que recomiendo ver), así como co-guionista de la no tan aclamada PARANORMAL ACTIVITY:
DIMENSION FANTASMA (2015). Juntos, Whannell
y Robitel
crean una historia que vale la pena para Elise, que funciona como una significativa
parábola sobrenatural de terror sobre los efectos del trauma infantil y el
estrés postraumático, basándose en ideas que ya se introdujeron en INSIDIOUS 3.
Tanto esta última como la que se estrena ahora en pantallas, se complementan
narrativamente en ese sentido, y aun así cumplen con las reglas
sobre cómo funciona el universo de INSIDIOUS desde las dos primeras entregas.
Al mismo tiempo, es la menos innovadora de todas ellas, desde la perspectiva de
la narración y sus esfuerzos por cerrar completamente el círculo narrativo
entre todas ellas. En ese sentido, La última llave no llega a ser un capítulo
"necesario" en la saga INSIDIOUS.
En términos de dirección, Robitel hace un buen
trabajo al mantener un ambiente fantasmagórico durante gran parte del metraje.
El director convierte el hogar de la
infancia de Elise en una pieza efectivamente espeluznante, cubierta de
telarañas y sombras que ocultan secretos. Cuando se trata de ejecutar los “sustos”
de la película, Robitel usa varios de los mismos trucos cinematográficos que Wan
empleó en la original e incluso repite algunos de los infames trucos de cámara de la película, jugando en su
contra, ya que si eres fanático de la franquicia vas a saber perfectamente por
donde aparecerá el “jump scare” de turno.
Tanto las perturbadoras revelaciones sobre el pasado de
Elise y los misteriosos desarrollos en el presente son más impactantes emocionalmente gracias a la
actuación de Lin Shaye, que sin duda, es lo mejor de la película, además se
establece como un ícono de terror con su trabajo aquí. Si bien INSIDIOUS: LA
ULTIMA LLAVE no revela demasiadas
capas emocionales para el personaje de Elise
Rainier, proporciona un contexto significativo para su modo de pensar y su
comportamiento en las otras películas.Shaye, como lo hizo en la tercera
entrega, se pone a la altura de las circunstancias y maneja hábilmente los
intensos desafíos emocionales presentados aquí, así como los momentos más “tranquilos”
de la película. Gracias a la actuación de Shaye (que es del tipo que generaría
rumores en los premios cinematográficos si no estuviera en una película de
terror).
Specs y Tucker (Whamell y Sampson) son añadidos a
la historia simplemente cuando se trata de proporcionar alivio cómico en la historia,
pero tienen una buena química en pantalla con Lin Shaye.Los otros
miembros de la familia Rainier, incluidos los padres de Elise, Gerald (Josh
Stewart) y Audrey (Tessa Ferrer) en los flashbacks de
la película, son en su mayoría bidimensionales y sirven para mover a Elise a lo
largo del arco de su personaje en la película. Mientras tanto, el veterano
actor de películas de monstruos Javier Botet (también conocido por interpretar
criaturas en películas como MAMA o el Crooked Man en EXPEDIENTE WARREN 2) ofrece una actuación
realmente estrafalaria y terrorífica como el villano “Keyface”aquí, a pesar de
que el villano en sí carece de los toques que hicieron memorables monstruos
como "El hombre que no puede respirar" o "Lipstick-Face Demon"
en las películas anteriores de INSIDIOUS.
En definitiva y resumiendo: Teniendo todo en cuenta, INSIDIOUS: LA
ULTIMA LLAVE triunfa como sentido de
cierre a la franquicia y logra conectar las cuatro películas de la serie de
terror juntas. La película no es tan revolucionaria las anteriores
(posiblemente en calidad, sea la peor parada) y no cambia las reglas del juego
en ningún momento, pero proporciona una recompensa a los espectadores que les
gusta el personaje de Lin Shaye, realmente los que
abandonaron la saga después de la secuela no necesitan volver a la franquicia
por una razón de peso. En cuanto a los que se han quedado con la franquicia
hasta ahora, nuestro consejo es que disfruten esta entrega sin demasiadas pretensiones,
y simplemente para pasar un buen (mal) rato.