El actor cómico (Sacha Baron Cohen) detrás de
personajes como Ali G y Brüno Gehard regresa en BORAT,
LA SECUELA (2020), que fue estrenada
exclusivamente en Amazon Prime Video y precisamente en el momento adecuado.
Para la secuela, Jason Woliner asume las funciones de dirección,
después de que Larry Charles dirigiera la primera película. BORAT, LA SECUELA es
el regreso de Sacha Baron Cohen en un papel salvaje e impactante en
los tiempos que corren.
Catorce años después de su primera aventura, el cuarto mejor periodista de Kazajistán (Sacha Baron Cohen) vuelve a Estados Unidos, pero esta vez viaja con su hija Tutar (Maria Bakalova).
Es extraño volver a ver a Borat en 2020, no solo porque han pasado 14 años desde su última aventura y no solo porque el año se ha definido por una pandemia global que ha resultado en tantas enfermedades, muertes y politización innecesaria. También es extraño porque las sensibilidades han cambiado desde que se estrenó la primera película y por si esto fuera poco, el propio Sacha había comentado en varias entrevistas que seria imposible realizar una secuela de BORAT porque al ser ya un personaje tan reconocido por el público, le sería más difícil realizar esos gags con cámara oculta. Indirectamente, la primera película, cuyos variados y muchos prejuicios eran una broma sobre el personaje y no bromas hechas por una figura que debería ser tomada en serio, probablemente se vería particularmente mal en esta era y en este momento particular del pensamiento político. Esa sigue siendo la broma. No es un hombre bueno, decente y / o reflexivo. En la primera película, el personaje sirvió como un espejo, reflejando los prejuicios variados y la intolerancia de los sujetos que entrevistaba.
De una manera más directa, las sensibilidades que rodean a Borat han cambiado en esta secuela porque la gente es consciente de la broma. Debido a la primera película, conocen a Baron Cohen y conocen a Borat. Esto representa un desafío para el actor y, en la lógica de la película, para el personaje y el director Jason Woliner, que superan este gran problema con una serie de disfraces ridículos y personalidades distintas (como "John Chevrolet"), que siguen siendo igual de divertidos, aunque no veas al propio Borat realizando esas bromas.
Para ayudar a que la actuación no se reconozca, Borat también consigue una compañera en la persona de su hija previamente desconocida Tutar (Maria Bakalova), que se mantiene firme con Baron Cohen y sola en las diversas secuencias de humor. Su presencia conduce a algún gag que Borat / Baron Cohen nunca podría obtener por su cuenta, incluida una visita a una clínica médica cristiana para mujeres, un baile de debutantes (como una especie de baile para niñatos ricos para se presentado a la sociedad) y como no, un ultimo gag con el personaje de Tutar en una polémica entrevista que dejara al público con la mandíbula colgando.
Lo importante de una película como BORAT, LA SECUELA es que tanto el personaje como el de su hija son un espejo de los miedos, resentimientos y reservas, que no solo reflejan, sino que exageran hasta el ridículo. Especialmente en 2020, cuando Estados Unidos bajo Donald Trump muestra una vez más su lado más oscuro, con partidarios de Trump, teóricos de la conspiración y, por supuesto, políticos republicanos. En la certeza de sentarse frente a un interlocutor un tanto idiota, se revelan contradicciones e ideologías peligrosas que, sin embargo, ya se pueden observar en sitios de noticias casi cada día.
En definitiva y resumiendo: Si bien esta secuela no tiene
tantos momentos significativos como la original (que siempre serán recordados)
simplemente por el ultimo gag de Tutar en una entrevista ya merece sin duda,
ver esta secuela. Y también es curioso ver como el propio Baron Cohen tuvo que
sacar una subtrama rápida debido a la pandemia del Covid y que realmente funciona.
Sinceramente creo que BORAT, LA SECUELA es más una secuela bastara de la serie de Cohen titulada
¿QUIEN ES AMERICA? (2018) que de la
propia BORAT (2006) pero que a todo fanático
del actor y del humor grosero pero inteligente seguro que le hará pasar un (muy)
divertido rato.