Basada en un guion de Dennis Feldman (EL CHICO DE ORO con
Eddie Murphy y más tarde VIRUS con Jamie
Lee Curtis), SPECIES- ESPECIE MORTAL (1995) llego en un momento donde el cine de terror/
ciencia ficción estaban por un momento bastante duro en lo que se refiere a
calidad. Además, el largometraje es más un cruce entre varias tendencias, ya
que el punto de partida es el de una película de ciencia ficción, con el tema
clásico de una especie extraterrestre que intenta afianzarse en nuestro planeta
y que además tiene malas intenciones respecto a los seres humanos, en lo que se
convierte en un “Body Count” más cercano al terror.
Cuando una bella hembra resultante del cruce de un ser humano y un alienígena (Natasha Henstridge) se escapa de un laboratorio de observación, el científico Javier Fich (Ben Kingsley) envía en su búsqueda a un asesino profesional (Michael Madsen), a un psiquiatra, a una bióloga y a un antropólogo. Mientras siguen su pista por Los Ángeles, el equipo descubre cuál es su plan; aparearse con hombres para producir crías que puedan destruir a la raza humana. Mientras su mortal reloj biológico avanza con rapidez, Fitch y su equipo se lanzan a una inquietante persecución de la que depende el destino de la humanidad.
Comentando mas sobre el terror que contiene SPECIES, incluye muertes violentas, una criatura bastante inquietante y una atmosfera que puede recordar a HIDDEN: LO OCULTO (1987). Sin embargo, con la moda del momento de ser más acción y un thriller “sexual”, SPECIES también buscó atraer a un público más amplio al presentar persecuciones de automóviles e incluso tiroteos. Las secuencias más sexys también ayudaban a que el público juvenil que supuraba hormonas fuera ver la película, ya que la bella modelo Natasha Henstridge nunca es tacaña con sus encantos que expone generosamente durante toda la proyección (para beneplácito del espectador). De hecho, la idea principal es seguir la búsqueda de un organismo genéticamente modificado que tenga ambas propiedades humanas, mientras que es una entidad extraterrestre que busca reproducirse. El concepto de organismo en rápido desarrollo no es nuevo, pero el guionista ha introducido aquí la idea de que la hembra en cuestión está buscando una presa que le permita dar a luz. Esto justifica desde un punto de vista narrativo las secuencias de sexo suficientemente calientes que llegan a decorar la historia.
Si la mutante en cuestión es interpretada con gran encanto y convicción por la modelo Natasha Henstridge y que fue su debut en el cine, no podemos decir que los científicos que la cazan gocen del mismo trato. A menudo reducidos a clichés (el científico aprendiz de brujo, el médium capaz de ver el futuro cercano, el rudo cazarrecompensas etc.), los personajes apenas se desarrollan y, por lo tanto, dan la sensación permanente de asistir a una pequeña serie B sin mucho valor agregado. Sin embargo, los papeles están en manos de algunos grandes actores como Ben Kingsley, que abre mucho los ojos, para parecer que está actuando (incluso así, parece convincente). Finalmente, solo Forest Whitaker parece realmente darlo todo en un papel que no es muy interesante como médium, que además es un fácil hilo conductor para rastrear más fácilmente a la criatura. Michael Madsen y Alfred Molina parecen estar bastante aburridos y solo están allí para pagar sus facturas (sobre todo el primero).
Por su parte, el director australiano Roger Donaldson realiza concienzudamente el producto, pero sin verdadera pasión, quien por entonces nunca se acercó al género del terror. Más a gusto en la película de aventuras (MOTIN A BORDO) o en el thriller (NO HAY SALIDA) opta por soluciones extrañas (demasiada cámara lenta, o incluso distorsiones de imágenes para no mostrar demasiado a la criatura). Realizada con cierto sentido de eficiencia, SPECIES en realidad carece de un guion realmente bien escrito para emocionar y elevarse por encima de su estatus como una mera serie B y un entretenimiento casual.
Si bien, aplaudo el trabajo de diseño realizado por HR Giger en la criatura Sil, las diferentes apariencias del monstruo no siempre son valoradas por los efectos especiales. Como muy a menudo, los efectos prácticos son efectivos (me encanta por ejemplo “el beso de la muerte”), pero los últimos diez minutos se ven empañados por un abuso de los efectos digitales, en un abuso que, si ya chirriaba en su época, el ver la película hoy en día, se puede ver que esos momentos han envejecido muy mal.
En definitiva y resumiendo: SPECIES-
ESPECIE MORTAL es un producto de serie
B con una buena producción detrás, que destila ese estilo de los años 90 por
todos lados. Una historia muy simple, pero efectiva en la mayoría de su
metraje, mezclando diferentes géneros, pero donde el verdadero reclamo era la
belleza de Natasha Henstridge y sus desnudos gratuitos, haciendo que
en el videoclub se oyeran comentarios del tipo: “Es un alíen, pero me la f****”.
Una película de ciencia ficción/ terror entretenida pero carente de alma.