El recuerdo de Marnie (2014)

-Cuando se anunció la noticia de que el famoso estudio de animación japonés “Studio Ghibli” cerraba sus puertas, esperando una remodelación total y un nuevo cambio de rumbo sin sus fundadores, a más de uno se nos partió el corazón, ya que de ahí salieron grandes películas como MI VECINO TOTORO (1988), LA PRINCESA MONONOKE (1997) o EL VIAJE DE CHIHIRO (2001) con un maestro como Hayao Miyazaki a la cabeza y que se merece una buena jubilación. Ahora nos llega a las pantallas EL RECUERDO DE MARNIE (2014) la despedida del Studio Ghibli a todos sus fans.

-La historia sigue a Anna, una jovencita introvertida y a la que no se le da muy bien relacionarse con los demás. Además padece de asma, por este motivo es enviada de vacaciones a un pueblo rural con sus tios,para respirar aire puro y mejorar, pero no solo se topara con eso; también encontrara una casa misteriosa, supuestamente abandonada y conocerá a la que parece ser la hija de los dueños,Marnie.


-Dirigida por Hiromasa Yonebayashi en su segundo largometraje después de ARRIETY Y EL MUNDO DE LOS DIMINUTOS (2010) y basada en una novela de Joan G. Robinson nos cuenta una historia de amistades y emociones personales, con una animación sobresaliente, tanto en el dibujo, el diseño de los personajes, la iluminación y los paisajes, como siempre Studio Ghibli no falla en ese punto, junto a ello un excelente score de Takatsugu Muramatsu,con unas melodías que acompañan perfectamente el desarrollo de la historia, aparte de poner un toque sentimental cuando es necesario.



-La primera media hora, establece la personalidad de la protagonista Anna, una joven tímida y atormentada que se “odia a sí misma” hasta que conoce a Marnie, una chica que parece el polo apuesto, ya que mientras una  sobrevive día a día, la otra con su aspecto de muñeca parece salida de un cuento de hadas, aunque como no, sus traumas infantiles que se irán desarrollando durante su amistad que se ira vinculando poco a poco.



-En esta película no tendremos un villano, en la que el interés está en saber quién es realmente Marnie, si es un ser humano real o una invención de una niña triste en un desarrollo lento y pesado para lo que sería el público infantil, ya que EL RECUERDO DE MARNIE está  enfocada más  en satisfacer a los adultos que a los niños, mucho me temo que más de un niño  acabara dormido en la butaca durante la proyección. El trabajo del director que con algunas secuencias quiere dejar su sellos personal, sin alejarse de la tradición del Studio Ghibli.

-El clímax final es una acrobacia en la que se resuelve el misterio sobre Marnie, rellena demasiado la historia de fondo, en la que se explica toda la conexión con todos los personajes de la historia, en la que otra vez podía haber sido más rápido e incluso algún corte en el metraje hubiera sido un acierto, en que los más pequeños (de nuevo) no entenderán la cantidad de referencias que hay entre las imágenes y los sentimientos. Como no, siguiendo la estela, también se hace apología de la naturaleza, donde el campo, lejos de la ciudad donde vive Anna, es un lugar saludable y restaurador, donde se deja que la imaginación funcione a toda máquina.



-En definitiva y resumiendo: Quien espere una historia al estilo del maestro Miyazaki, se sentirán defraudados, porque EL RECUERDO DE MARNIE es una historia sobre sentimientos y problemas sobre uno mismo, aunque tenga un toque mágico no llega a niveles sobrenaturales de otras obras. Aparte de ello, tiene demasiados momentos azucarados que hacen que sea un poco lenta la visión, en la que claramente los niños pequeños no entenderán “casi nada”, en lo que sería la última obra de la era Miyazaki y el comienzo de algo totalmente diferente.