Adaptación del famoso musical de Andrew Lloyd Webber,
'Cats'. La trama gira en torno a una tribu de gatos -los Jellicles- durante la
noche del año en que toman su más trascendente elección: la de decidir cuál de
ellos renacerá en una nueva existencia...
Cuando avise a varias personas de que iba a ver CATS (2019) casi todos (por no decir todos) me
dijeron que fuera directamente ebrio para poder “aguantar” tal tortura cinematografíca
(según cuenta la crítica), pero como tuve un incidente viendo BLACK PANTHER (2018)
en la que fui ebrio de tal manera que incluso me invente un nuevo final para la
película (después descubrir cuando la volví a ver en casa de que mi final no existía).
Pero en esta ocasión quería ir a verla sobrio, ya que no quería que mi mente me
jugara malas pasadas creando nuevos recuerdos “gatunos” que no existían, y quería
ver con mis propios ojos si realmente era algo dantesco y llegado del auténtico
infierno.
Sinceramente tengo que empezar por lo positivo, que
realmente es poco, pero ahí está. El diseño de producción por parte de Eve
Stewart esta muy logrado, ya que al ser rodado casi todo sobre pantalla
verde/azul y CGI, es curioso ver como los elementos funcionan dentro de los escenarios,
realizados a escala mas grande que los personajes hace que te sumerga en su mundo
y hasta seria capaz de decir que si algún día saliera el libro de arte de CATS y cuando bajara su precio hasta los 10 Euros caería
para la “Biblioteca Critica”, pero lamentablemente la vaga dirección de Tom
Hooper limita ese arduo trabajo. Después de esto directamente voy a hablar
de los fallos que contiene la película, ya que realmente había momentos que parecía
un trabajo de fin de curso de unos universitarios que estudian cine y crean un
proyecto simplemente para conseguir una nota de 5 raspada y poder aprobar.
Sinceramente vi una película de alto presupuesto (100 millones que no se a donde
fueron) que directamente no paso por un “control de prueba” de los efectos
visuales. ¿pero quien fue el valiente que dio luz verde para ser estrenada
cuando realmente faltan la mitad de las cosas por pulir?.
Y lo peor de todo ¿Cómo ha conseguido pasar el corte de
nominados a mejores efectos visuales para los premios Oscar, superando a películas
como AD ASTRA (2019)?
Pero directamente CATS crea una nueva especie
de efectos especiales que directamente van más allá del tiempo, el espacio y tu
propia mente. Hay que ser sincero, tiene uno de los peores CGI que he visto en
mi vida, consiguiendo que sean totalmente aterradores y que puedan conseguir
que el espectador tenga pesadillas durante varias noches. Son más creíbles los
actores con maquillaje y leotardos del musical, que actores y actrices
cubiertas de pelo digital que no llega ni a estar renderizados (aviso, he visto
la versión “mejorada”), en varias tomas se ve como un desequilibrio de texturas
que no cuadra, con el consecuente sangrado de las pupilas por parte del
espectador y forzar una mueca de disgusto que te pilla por sorpresa. Tampoco
funciona que gran parte de la película se compone de primeras tomas, haciendo
que las caras de los actores parezcan filtros de Snapchat de gato, pero incluso
peor que esos propios filtros. Algo que realmente es pesadillesco son las
escenas donde aparece unas cucarachas también humanoides o extraños
experimentos de un doctor loco y directamente los rostros humanos no coinciden
con el tamaño, teniendo un aspecto deformado y dejo para el espectador valiente
que descubra que son los ratones en la historia.
El vestuario tampoco tiene sentido ¿por qué algunos gatos
usan chaquetas de piel o zapatos y luego otros están descalzos? Una cosa que me
llamó la atención fue cómo algunas manos tienen pelaje, pero otras no. Por
ejemplo, Jennifer Hudson solo tiene sus manos con las uñas
pasadas por la manicura. Para algo que se enorgullece de contar con la
"tecnología de pelaje digital", sería bueno presenciarlo en su
realización completa donde no me distraigan los pedazos de piel humana que
salen del cuerpo del CGI. De todos modos, estoy divagando. Esta película fue
extraña desde el principio, pero ¿qué pasa con la historia? Historia… hablamos
de CATS un musical que directamente no
tiene casi hilo narrativo y sobre todo coherente, lo que podría haber ayudado a
su versión cinematográfica a extender su universo (o al menos crear algo
comprensible). Resumiendo, en pocas palabras: Una historia donde solo se pasean
diferentes gatos que cantan y pretenden ser elegidos para subir al cielo de los
Jelicos para volver reencarnados en otro gato mejor, obvio que cada vez que
aparece un gato pues claramente tenemos una canción y así hasta el final. Pero
debido a que esta película presenta un elenco repleto de estrellas, casi no
tienes la sensación de un personaje, ya que solo logras que ese artista
proyecta su truco conocido con la personificación ocasional de un gato. El gato
de Rebel Wilson es solo Rebel Wilson haciendo lo
que mejor sabe: El subnormal. El gato de James Corden es solo James
Corden cantando vestido de gato. Creo que posiblemente el único actor
que parece disfrutar con ello es Idris Elba como Macavity, pero solo
piensas que como puede ser que un gran actor como es aparezca en semejante aberración.
La película tiene el poder de usar su rareza infernal para
resultar atractivo. Un musical es tan bueno como sus números musicales y no
importa como de exclusivos sean los ajustes y como de grandiosa sea la
coreografía. La composición de la toma se compone principalmente de tomas en
primer plano, pero esto se enfatiza en la mayoría de los números musicales, por
lo que a menudo tienes al actor asaltando la cámara mientras los bailarines de
fondo se ven borrosos en el fondo (admito que seguramente los bailarines del
fondo tenían una foto imprimida en papel mate con un filtro de gato y se lo engancharon
con una chincheta en la frente para rebajar costes). Tenía las herramientas
para hacer que la composición de la toma fuera inventiva y sumergiera al
público, pero todo se mantiene al nivel de todo lo demás. No ayuda que la
edición sea horrible, ya que presenta muchos errores de continuidad. Hay una
escena a mitad de la película que realmente os juro que no sabia si estaba
viendo CLIMAX (2018), SUSPIRIA (2018) o MIDSOMMAR
(2019) incluso llegue a pensar que aparecería Freddy Krueger y soltara: “Welcome
to Prime Time ¡Bitch!.
Al final, tuve que pensar mucho para averiguar para quien sería
atractiva CATS y la respuesta se reduce a
nadie. No es algo agradable para presenciar. No será atractivo para los niños,
y aunque este calificada para todos los públicos, esos niños posiblemente
tengan pesadillas el resto de su vida o se conviertan en el nuevo Luka Magnotta.
Si ya de por si el musical da un poco de “Cringe” no os podéis imaginar cómo
llega a ser la versión cinematográfica. Quizá lo único que pueda hacer que tu corazón
vuelva a latir durante el metraje es Jennifer Hudson cantando "Memories",
pero en ese momento te enfocan a Judi Dench vestida de gata y te entra el
bajon. Un simil seria cuando te masturbas viendo una película porno y justo cuando
llegas al clímax te ponen la cara de sobreactuación del actor o la actriz en
primer plano.
En definitiva y resumiendo: CATS
es la experiencia cinematográfica del año. Es tan horrible, desastrosa e
infernal que, aunque quieras apartar los ojos, hay algo que te lo impide y te
sientes totalmente cautivado por todo lo que ocurre en pantalla. También es
importante desconectar el cerebro a los pocos minutos, porque es posible que se
recaliente al fijarte en tantos horribles detalles tanto de CGI y actuación, lo
que puede dar a una embolia cerebral. Esta claro que su fecha limite para estrenarla
tenia un nombre y era STAR WARS.
Universal en un acto de fe digno de la biblia, estrena CATS para contraprogramar tal saga espacial. Esta película
es la antítesis total. Es una vergüenza absoluta para todos los involucrados. Tom
Hooper debería ser expulsado de los estudios durante unos cuantos años,
pero sinceramente y lo creo, CATS será una
película que con el tiempo llegara al culto de lo infecto, un musical demencial
que podría competir directamente con BREAKIN 2:
ELECTRIC BOOGALOO (1984) o THE APPLE (1980).
