A veces, sorprende que en los tiempos que corren, y cuando
casi todo el tipo de humor que se realiza esta “bajo lupa” de ser ofensivo,
inmoral etc. debido a vivir en una época donde el ser humano de pronto tiene la
capacidad de tener la piel más fina, que todavía haya largometrajes que
intenten escandalizar con su humor. UNA HERENCIA DE
MUERTE (2022) del director y
guionista Dean Craig, pretende ser una comedia negra con
personajes antipáticos y con gags que seguramente serán vulgares para una variedad
de espectadores. Pero tomar todos los ingredientes necesarios para crear esa sensación,
a veces no es necesario con ellos, sino con un director que sepa cómo manejarlos…
Macey (Toni Collette) y Savanna (Anna Faris) andan justas de recursos, pero sobradas de voluntad. A estas dos hermanas, que a duras penas consiguen sacar adelante su destartalada cafetería, se les ocurre una idea para salir de pobres: ganarse a su pudiente tía Hilda (Kathleen Turner), que padece una enfermedad terminal, y pegar el pelotazo. Sería el plan perfecto si Macey y Savanna no fueras las únicas de la familia con ganas de convertirse en herederas de esta matriarca controladora y cascarrabias.
Gracias al elenco que participa en UNA HERENCIA DE MUERTE, da la sensación que estamos ante un potencial clásico de comedia de humor negro, así como una trama básica de los miembros de una familia que pretende que su rica tía moribunda le deje el testamento a uno de ellos. Dean Craig es conocido como el guionista de la simpática y exitosa comedia británica UN FUNERAL DE MUERTE (2007), y también escribió el guion de su remake americano. Pero como director, la verdad que su filmografía es bastante dudosa de ser llamada “de calidad”. El gran problema que arrastra UNA HERENCIA DE MUERTE, es que Craig tiene crisis de identidad, y no sabe que realizar con lo que esta filmando, y tampoco estaría muy inspirado con el guion. Juntar a un grupo de personajes antipáticos, de moralidad dudosa, que se dedican a insultarse los unos a los otros, no hace gracia. Y da igual que tengas a Toni Collette o Anna Faris en el elenco, porque hasta ellas mismas parecen darse cuenta que el largometraje hace aguas como el Titanic.
Tocando un solo genero como es la comedia, también UNA HERENCIA DE MUERTE no funciona. Y notas los avisos de que es así, cuando (sin exagerar) quince minutos de metraje con un gag alargado donde su finalidad es ser lo mas vulgar posible. Cuando se prepara tanto una escena que pretende funcionar en términos de comedia, hay que saber medir bien los tiempos, porque cuando llega el impacto, ya se ha escapado toda la chispa. También se nota que cuando quiere ser demasiado oscura u ofensiva, no se atreve del todo, porque enseguida da marcha atrás para volver al bucle de los personajes gritándose entre sí. Intenta crear un juicio moral cada diez minutos y ese tipo de repetición, lamentablemente cansa. En lo referente al elenco, Anna Faris se ve mas cómoda realizando el papel de hermana gritona y maleducada, pero a Toni Collette se le ve incomoda, no teniendo una química con su “hermana” en pantalla. David Duchovny esta cómodo en el papel de primo que intenta acostarse con su propia prima (Collette) diciéndole que simplemente hay webs porno de sexo entre primos. Como personaje desagradable, la verdad es que realiza el mejor papel del largometraje. Kathleen Turner simplemente se dedica en sus escenas a gritar e insultar, entre algún gag de mocos (en serio) o arcadas.
En definitiva y resumiendo: UNA
HERENCIA DE MUERTE puede tener, a
primera vista, un elenco ganador, y tiene elementos de comedia listos para ser vulgares
(como un depredador sexual o un pene de mentira), pero Dean Craig
no sabe dar con la tecla correcta, tanto en dirección como en guion.
Posiblemente el elenco se divirtió más detrás de las cámaras que delante de
ella, pero eso el público nunca podrá saberlo. Bajo mi opinión, una oportunidad
perdida.