La mujer del camarote 10 (2025)

Hay thrillers que se sienten como laberintos y otros que se parecen más a un camarote: elegante, ordenado… pero sin salida. LA MUJER DEL CAMAROTE 10, dirigida por Simon Stone y estrenada por Netflix el 10 de octubre de 2025, pertenece con dignidad a esa segunda categoría. Basada en la novela de Ruth Ware, la película navega entre el suspense y el déjà vu, con una intriga que promete tempestad y entrega una marejada tranquila.

A bordo de un lujoso yate por motivos de trabajo, una periodista ve cómo alguien cae al mar. Pero, cuando nadie la cree, decide arriesgar su propia vida para descubrir la verdad.

La premisa tiene el eco clásico de Agatha Christie, pero con un timbre más contemporáneo: el de una mente que duda de sí misma mientras el mundo duda de ella. Stone aprovecha el confinamiento del yate como escenario psicológico: pasillos tan estrechos como la credibilidad de la protagonista, salones resplandecientes que ocultan corrientes oscuras. La fotografía de Ari Wegner brilla en ese equilibrio entre glamour y amenaza; hay cenas donde las miradas cortan más que los cuchillos, y persecuciones donde el viento parece una conspiración.


Hay momentos que destacan por su tensión visual, como una cena formal donde las miradas se cruzan como cuchillos, o una búsqueda nocturna por la cubierta donde el viento y las olas amplifican la paranoia. Knightley es el ancla emocional; su Laura es una mujer al borde, con una vulnerabilidad que hace creíble su espiral descendente, y escenas como su confrontación con el dueño del yate (Guy Pierce) –una figura de autoridad fría y calculadora– transmiten una frustración palpable ante la incredulidad colectiva.  David Ajala como expareja del personaje de Alice y Hannah Waddingham como una de las invitadas, aportan sospechas sutiles que mantienen el pulso acelerado.

Y ahí está el dilema. El guion, coescrito por entre cuatro personas (entre ellas, el propio director), sigue el mapa del thriller psicológico con la obediencia de un marinero novato. Los giros sorprenden… hasta que uno recuerda haberlos visto antes, bajo otros nombres y en otras cubiertas (LA CHICA DEL TREN, LA MUJER EN LA VENTANA). Lo que podría haber sido una exploración del "gaslighting" y la credibilidad femenina termina quedando en un subtexto tímido, apenas un eco bajo el rugido de las olas. Técnicamente, la película es impecable para un thriller de streaming. Stone usa el yate como un laberinto flotante, con encuadres cerrados que refuerzan la paranoia, y el diseño de producción, con salones lujosos y camarotes claustrofóbicos, crea un contraste efectivo entre opulencia y amenaza.


En definitiva y resumiendo: En el contexto de 2025, un año saturado de adaptaciones literarias al streaming, LA MUJER DEL CAMAROTE 10 llega con el respaldo de Netflix y un elenco atractivo, liderados por lo mejor del largometraje, que es la actriz Keira Knightley. Es una cinta que funciona como un pasatiempo de fin de semana, para espectadores que busquen un misterio que no les haga pensar demasiado, dentro de un guion que a pesar de alguna grata sorpresa, tiene un guion predecible.  Un misterio marino sólido que entretiene, pero no sorprende.