-Dirigida por Richard Franklin, que también fue director de películas
de terror como PATRICK o la secuela de PSICOSIS y protagonizada por Elisabeth
Shue que había protagonizado su primera película que fue KARATE KID enamorando
a más de la mitad de chavales de la época, decidió participar en una película más
thriller que de terror donde tendrá que sobrevivir a un chimpancé que le hará
la vida imposible a nuestra querida Shue.
-La película funciona perfectamente como un entretenimiento
de la época y consigue a pesar de contar con solo 6 personajes en el plantel no
aburrir en ningún momento, da su tiempo a presentar a su protagonista e identificarnos
con ella, además de contar con un gran actor como Terence Stamp para los
primeros compases del metraje, y meternos en el único escenario donde transcurrirá
la acción que es una mansión en la que i
un profesor de universidad (Stamp) intenta descubrir los secretos de los primates
con la ayuda de su ayudante (Shue) donde se desataran escenas terroríficas gracias
a la gran atracción de la película que es un chimpancé que hace de mayordomo de
la casa (cierto).
-Sin entrar mucho en el tema Spoiler, veremos que nuestro
amigo chimpancé es bastante celoso, que quiere a Shue para el solo (quien no, en esa época)
y ante la negativa de ella, empezar a hacérselo pasar canutas. Junto a una
banda sonora de Jerry Goldsmith que recuerda nota por nota a otra banda sonora
que hizo para la gran GREMLINS veremos pasar escenas que se quedaran grabadas
para el espectador como el momento “perro” o toda la parte cuando aparece el
personaje del novio de la protagonista y sus amigos en la mansión donde el chimpancé comienza una autentica sangría
con originales formas de eliminar a los que le molestan a su paso.