Terrores Nocturnos: Hellraiser VI: Hellseeker (2002)

 

Para quien no lo supiera, HELLRAISER V: INFERNO (2000) fue un fracaso. Un guion de una película que era otra en realidad, malas actuaciones y Clive Barker maldiciendo el largometraje. A los ojos de los productores, las razones de este fracaso son claras. La película no ofrecía suficientes referencias al universo de HELLRAISER y, sobre todo, el protagonista se hacía odiar demasiado. Con esta "observación", Miramax lloró el fracaso y decidió hacer una nueva película, retomando generalmente la trama de la original. Esta vez, el personaje principal tendrá que ser más "entrañable" para, esperamos, ser del agrado del espectador…

Cuando el puzzle es encajado de nuevo, el devastador demonio Pinhead (Doug Bradley) y su legión regresan para desatar el infierno en la Tierra y acabar con todo aquel que se oponga a ellos. Pero hay alguien dispuesto a hacer frente, Kirsty Cotton (Ashley Laurence) la única persona que ha derrotado a Pinhead en el pasado y que puede salvar al mundo de esta terrible amenaza.

Para esta sexta entrega titulada HELLRAISER VI: HELLSEEKER (2002) ha llegado el momento de buscar un nuevo director. Una vez más, la producción atraerá a los talentos prometedores que aún no han demostrado su valía. Como fue el caso de Kevin Yagher (director de HELLRAISER IV) descubren una nueva perla: Rick Bota. Una persona que había trabajo como director de fotografía en películas como ARMA LETAL 4 (1998) o BARB WIRE (1995) Un curriculum vitae que le permitirá plantear unos requisitos visuales sobre la realización de HELLRAISER IV: HELLSEEKER. Entonces, a Bota se le asignó un presupuesto de tres millones de dólares, uno más que Scott Derrickson para HELLRAISER V: INFERNO. A pesar de esto, las restricciones están, por supuesto, a la orden y todo el equipo discute seriamente sobre la eliminación de escenas (como la representación de Satán a través de una costosa figura animatrónica).



Y después esta la sinopsis, que es mas falsa que el cartel de un circo, ya que nos prometen a la protagonista de la primera y segunda parte como una vuelta en HELLRAISER VI, pero no deja de ser un personaje bastante secundario. Aquí el protagonista es su marido Trevor (Dean Winters).  Lo que es mas lamentable de HELLRAISER VI, es que básicamente es un “copia y pega” con algún cambio de la misma historia que HELLRAISER V. Por lo tanto, los fans de la saga no tienen ningún “efecto sorpresa” y lo que es peor, el final es el mismo. Pero HELLRAISER VI intenta tener algún truco bajo la manga, como el vender que Ashley Laurence es la protagonista, pero su personaje realmente iba a llamarse de otra manera, porque en el guion no existía el personaje de Kirsty (se comenta que el propio Doug Bradley hizo presión para que su Ashley Laurence volviera a la saga) pero al final su presencia suena más a un guiño decepcionante que a una verdadera fuente de interés para el espectador o la historia.



Aun así, además de este personaje, el director y su guionista Carl V. Dupré inyectan a su historia algunos elementos adicionales asegurando el vínculo con el resto de las películas de la saga. Por lo tanto, es una alegría descubrir nuevos cenobitas con apariencias cercanas a anteriores películas. Una vez más, la oportunidad de aplaudir el asombroso trabajo del maquillador Gary J. Tunnicliffe. También es divertido observar que el personaje de Trevor, mujeriego sin escrúpulos, no deja de evocar al personaje de Frank de la primera HELLRAISER. Finalmente, mencionemos la presencia de un descendiente de los LeMarchands en la película, interpretado por Doug Bradley (¡acreditado por este papel bajo el nombre de Charles Stead), creando el vínculo con HELLRAISER IV y por supuesto la novela original de Clive Barker. Pero Rick Bota es un director mediocre y lo demuestra en las escenas con pesadillas del protagonista que no tienen ninguna lógica real, al igual que los diversos flashbacks que marcan el regreso gradual de la memoria del protagonista. Todo está hecho para crear una complejidad artificial que finalmente lleve a una conclusión que no puede sorprender a nadie.



En definitiva y resumiendo: HELLRAISER VI: HELLSEEKER es una película muy decepcionante. Aparte de copiar casi la mitad del guion de la anterior entrega, el regreso de Kirsty Cotton es fallido y poco recuerda a la de la primera y segunda parte. Pinhead vuelve para aparecer solo unos pocos minutos (como el guía de viajes que te explica todo, por si eres demasiado tonto) y además Rick Bota pretende esconder el largometraje de que es un “direct to dvd” de manual, con una fotografía banal y unos filtros de color bastante lamentables. El ritmo al menos no es lento, y los secundarios importan poco. Y lo más sorprendente, es que, a pesar de ser una mala película, a Miramax y al propio Clive Barker le fascino tanto la visión de Rick Bota que le ofrecieron no una, sino dos películas mas de HELLRAISER, pero eso ya lo explicare en otro momento…