Sitges 2020: Hosts

 

Después de la poca información que había leído sobre HOSTS (2020) ya sea solo por su sinopsis o por su tráiler (que no he visto) es mejor avisaros que posiblemente haya un poco de leves spoilers para no estropear del todo la visión del espectador que tenga interés en la película, interés que sin duda voy a cuestionar seriamente durante la crítica.

“una pareja es invitada a la fiesta de Navidad de su vecino. En lugar de traer vino o un postre, traen muerte y tortura a la temporada navideña”.

HOSTS es la respuesta a lo que sucedería si mezclaras LA INVASION DE LOS ULTRACUERPOS (1978) con cualquier “home invasión” que se está de moda en estos tiempos. Para ser claros, esta es mi propia interpretación, ya que la naturaleza de las entidades se mantiene deliberadamente vaga. ¿Jack (Neal Ward) y su novia Lucy (Samantha Loxley) se infectan o simplemente son poseídos? Y dirigirse a la cena de Navidad de su vecino como inicialmente estaba planeado, solo que Jack y Lauren a los que conocimos originalmente, han cambiado fundamentalmente. Loxley y Ward pretenden realizar buenas actuaciones desde el momento en que se presentan a la cena. El problema es que poner “cara de póker” sobre todo Neal Ward y estar echando babas por la boca como hace Samantha Loxley no es algo para aplaudir desde la platea.

Lo mejor de HOSTS sin duda es el primer acto donde después de un monologo en plena cena se desata el caos absoluto, haciendo que el interés por la película suba como la espuma, pero el problema es que después de eso, la historia se va desinflando de una manera exagerada, como si realmente hubiera funcionado a la perfección como medio metraje, pero como largo consigue lo que quiere. Tenemos un monologo del personaje de Lucy cuenta una historia inquietante al pequeño de la familia Ben (Buddy Skelton) y que pretende ser simplemente una explicación para todo lo que esta pasando (no vaya a ser que el espectador sea idiota y no entienda las referencias) y que, en vez de provocar terror, lo que crea son risas de lo mal ejecutada.

El segundo acto se convierte en una historia de supervivencia enfocada en el personaje de Lauren interpretada por Nadia Lamin la hija mediana de la familia, que directamente es la persona más estúpida que puede haber en ese momento, ya que todas las elecciones que realiza son totalmente erróneas. ¿Te persigue alguien? Me voy al bosque, me escondo en el árbol mas pequeño y me pongo a llorar, en vez de correr en busca de ayuda. ¿Tienes un arma para atacar? La utilizo para cortar la electricidad y la dejo en el suelo, a pesar de que podría matar gente con ella. Son opciones que yo como espectador, solo hacía que gritar a la pantalla y enfadarme, porque no puede haber alguien tan inútil ¿o sí?.En el tercer acto, todo se descarrila de la peor manera posible, obteniendo algo de gore y sangre impresionante, pero que a mí solamente por el gore no me compras. Y el final sin duda es un “coitus interruptus” que simplemente parece que se acabó el dinero y los directores Adam Leader y Richard Oakes decidieron: “Pues aquí se acaba esto”.

En definitiva y resumiendo: HOSTS es un thriller que empieza siendo cruel y tenso pero que después falla en todo y más cuando intenta copiar al “New French Extremity” de principios de la década de 2000. Las actuaciones son fallidas (sobre todo el par de villanos, con los ojos gusiluz) y que como historia se intenta expandir en varias filosofías y significas, sin que ninguno de ellos llegue al espectador como tendría que haber sido. Exceptuando el gore y la sangre en ciertas escenas, HOSTS es un largometraje que personalmente no recomiendo (mi opinión, no una obligación) y que puede dejar pasar de largo sin que esto haga mella en tu vida.