El cine de terror indonesio ha experimentado un auge en los últimos años, explorando mitos y leyendas locales con una crudeza y visceralidad que ha cautivado a audiencias de todo el mundo. En este contexto, "SIKSA NERAKA" (2023), dirigida por Anggy Umbara, se presenta como una ambiciosa incursión en el género, utilizando el concepto del infierno como metáfora de los horrores humanos y las consecuencias de nuestras acciones.
Cuatro hermanos, a los que siempre se les han dado lecciones sobre el cielo y el infierno, desaparecen de repente y ahora se enfrentan al mismísimo infierno y a los castigos que ofrece por sus pecados.