A principios de la década de 1980, el género cinematográfico
de artes marciales basadas en el Shaolin estaba en crisis. La taquilla iba disminuyendo
y los espectadores se iban a ver otras películas. Sin embargo, cuando
finalmente en 1982 apareció la película EL TEMPLO DE
SHAOLIN en los cines, el género volvió
a regresar. La razón principal fue un joven actor de 19 años que se ganó a la
audiencia con sus habilidades en las artes marciales, pero también con su presencia.
Fue el nacimiento del actor Jet Li. Aparte el largometraje se
hizo y se estrenó en el apogeo de la Guerra Fría, cuando la mayoría de las
películas habían sido fuertemente censuradas o eran solo propaganda del
gobierno. El gobierno comunista también tuvo una historia complicada con el
verdadero Templo Shaolin, ya que denunció y encarceló a los últimos monjes que
quedaban y prohibió todo el material budista en la década de 1960.
El emperador Tang es traicionado y derrocado por uno de sus generales. El hijo de uno de sus esclavos (Jet Li) escapa al templo shaolin, donde aprende las artes marciales y trama la manera de matar al traidor, vengando así también la muerte de su padre. Los monjes lo ayudan y en el proceso, salvan al verdadero emperador. Basada en las historias de folklore del templo shaolin.